Sobrevivir a veces es el punto en tu vida. No tienes la convicción para arrebatarte la vida aunque sean innumerables las veces que te lo has planteado.
¿Qué diferencia hay entre estar vivo o muerto?¿Y si es la única manera de parar ese dolor en tu pecho que no eres capaz de controlar?
Pero realmente es la vida lo que te hace seguir viviendo cuando no encuentras ningún otro motivo que sea tan indispensable y obvio para no volvértelo a preguntar a ti mismo.
Esa vida hace que luches a diario por no perder el tiempo, tiempo en la cama llorando o esperando que pasen los días, que en esta vida jamás podremos recuperar aunque luchemos con todas nuestras fuerzas y energías.
Sé lo que es ser golpeado una vez tras otra. Sé que es preguntarse que está mal en uno mismo. ¿Por qué la felicidad parece no querer encontrarme?
Sé que es ser utilizado, usado y despreciado. Sé que se siente cuando pensás que tú vida no tiene sentido y no tienes ganas de vivir.
¿Crees que no sé que es caer? Sé lo que es estar ahí abajo, sé lo que es intentar levantarse y que te golpeen más fuerte.
Escrito no identificado.
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