lunes, 11 de junio de 2018
El Suicidio
El suicidio es, la pura enfermedad del ser, en palabras lo más sencillas posibles. El suicidio puede ser abordado de muchas perspectivas pero siempre tiene una característica en común, la negativa del yo con el deber ser. A mí parecer la falta de adaptación a la obscuridad, la falta del desarrollo del contrapuesto, la falta del sentir: “de la obscuridad nace la luz, y de la luz la obscuridad”.
El suicidio es muy diferente aún así tenga una misma esencia, es como una persona, las hay muchas diferentes pero no dejan de ser una persona con la misma estructura. A casos conocidos, el suicidio es lo más cercano al alivio que creemos encontrar, en situaciones que todo es negativo y las cosas nos impactan de forma tal que no logramos aprender más nada.
El suicidio es como cuando el viento se lleva una hoja, nos llevaron la vida. A la persona algo lo volvió tan débil que no puede continuar. No puede aprender, su psiquis no soporta el dolor de seguir con sus decisiones.
El suicidio es el punto de inflexión en una persona que se siente como una taza de café que se vacía. Aún así quede húmedo el fondo y quede un poco de contenido nunca volverá a ser café, ya está frío y es muy poco.
El suicidio es como una carrera de Miles y Miles de kilómetros, donde los contrincantes son extraterrestres y no sabes si te van a ganar y que capacidades tienen. Si ganas sigue la vida, si no, adiós.
El suicidio es la negativa de darte cuenta que esa carrera es infinita, y que sólo es cuestión de extremada perseverancia, porque el hombre, es un ser adaptable.
El suicidio es el equivalente a lo máximo de la locura, es pasarte por las nalgas todo lo que he dicho y verlo de diez mil millones de puntos de vista, tan así que al tener tanta información se te estremezca la piel y de todas formas no sepas nada, de todas formas aún no diste con el punto.
El suicidio es estudiarte el abecedario y no poder salir de ahí, de una mente cuadriculada, repasando con detenimiento más de una vez de la letra “a” hasta la letra “z” sin saber que las letras son una mera invención y solamente cumplen la función de comunicar. Es no poder hacer tu propio Canon, comunicar de forma propia.
Suicidio es, una condena, una consecuencia, una herencia, una responsabilidad, un orgullo en algunos casos, todo es válido. Hay gente que se mata para que no la maten primero.No todos los suicidas son depresivos, pero creo que en la mayoría de los casos se le da más valor a los demás que a uno mismo, aunque paradójicamente uno se suicide para “sentirse mejor”.
Suicidio es gran apego.
Suicidio es miedo.
Suicidio es desesperanza, vergüenza culpa, odio, pero no es un sinónimo a todo aquello, porque también es una decisión.
Suicidio es falta de amor, tanto que nos pesa más lo que a otros no tanto. Tanto que lo que nos pueden dar ya no suele ser útil.
Suicidio es una muerte a la muerte, una muerte a la luz, una muerte a la obscuridad, y una muerte a la nueva vida. A su vez es la luz a las tinieblas, la luz a la confusión, la luz a la sangre, la luz a la curiosidad, es una luz que no sabemos si estaríamos dispuestos a pagar.
Escrito por Augusto Arteta en Cuéntanos a todos.
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Hola soy suicida
ResponderEliminarHola me puedes ayudar quiero acabar de vivir
EliminarYo también quiero morir pronto o se como hacerlo
EliminarHola me siento mal desesperado y con muchas ganas de desaparecer alguien me ayuda
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