Hola, mi nombre es Lian, tengo 24 años, estoy “enamorado” de Lily, una chica hermosa. Le pongo comillas porque no creo en el amor, es más una reacción química del cerebro, pero sigamos con mí aburrida vida.
Lily tiene 24, cabello blanco como la nieve, ojos azules que me recuerdan al hermoso cielo azul, su sonrisa que hace iluminar mí mundo, ella siempre me saluda y me defiende. Podrían pensar que es una historia de un chico nerd y una chica popular inalcanzable, pero se sorprenderán.
He estado enfermo toda la vida, pasando de hospital en hospital, aún recuerdo la primera vez que llegué a uno, tenía frío, mí madre estaba llorando, sus negras lágrimas caían por sus mejillas empapando le el vestido azul marino. Vino un doctor, bata blanca, lo típico de un doctor, cuando entré a su clínica, el aire se sentía pesado, como una noche calurosa de verano, donde las sombras se mueven y los ventiladores están siempre encendidos, pero no hacía calor, de hecho, en cuanto entré, una ráfaga de viento frío chocó con mí cara.
Cómo dije, estoy “enfermo”, tengo…me impide hacer muchas cosas, Lily lo sabe. Esto empezó con una jeringa y terminó con otra.